Compartí en las redes
Analía tiene cinco hijos, las dos bebés que nacieron hace cuatro meses tienen graves problemas de salud a raíz de las complicaciones de su embarazo, en el cual casi pierden todos la vida. Ella está sola y tiene que encontrar otra vivienda antes del 10 de febrero y la misma tiene que tener ciertas condiciones para lograr retirar de terapia de Neonatología a su otra bebé, a la cual ve a cuentagotas mientras trata de hacer engorrosos trámites y alimentar con verdaderos malabares a sus otros hijos.
Analía pide con dolor una casa y una ayuda para cuidar a sus hijos y regularizar hasta donde se pueda su vida, asegurando la salud y desarrollo de sus hijos.
A segundos de presentarse, Analía Grisel Quiroga, de 26 años, ya se emocionaba de contar todo lo que le toca vivir. Es que su historia reciente es una de esas que son difíciles de asimilar. En varios momentos de la entrevista lloró y en otro detuvimos la grabación para que pueda responder al suave llanto de Valentina, una de sus dos bebés de menos de cuatro meses, la única presente, porque Violeta, su gemela, está desde su nacimiento internada en Terapia Intermedia del Hospital Vicente López y Planes, con graves secuelas tras haber sufrido varios paros cardíacos y severo daño cerebral, cuidada por las enfermeras a cargo de la Dra. García López y el Dr. Merlo.Valentina, mientras tanto, no desconoce el sufrimiento tampoco. Ella tiene una Ostomía a raíz de la perforación de un intestino y sus heces y orín deben ser llevados a un aparato externo. Recién se encontró con su mamá a los 20 días de vida, porque la tuvieron que trasladar a La Plata en un comienzo por la gravedad que tenía.
Ella debería estar en una habitación aparte de la casa, sin sus hermanos mayores y con estrictos cuidados, pero tiene que estar saliendo de la casa con su mamá, porque no hay con quién dejarla.
Violeta, internada en la terapia Neo del Htal. Vicente López y PlanesAnalía tiene que entrar a la terapia de Neonatología a ver a Violeta con el dolor de dejar a su otra bebé llorando afuera y luego retirarse, haciendo lo mismo con la beba internada. Ambas tenían apenas 30 semanas de gestación cuando Analía padeció las incesantes hemorragias a raíz de su Colestasis.
Por diferencias con el dueño de la casa donde hoy vive (un pequeño departamento en Coronel Rodríguez, esquina Colón, cerca del nosocomio) debe abandonar el espacio para el 10 de febrero y está completamente desesperada porque fue a todas las inmobiliarias a pedir alquileres que cumplan los requisitos, pero no la admiten por la cantidad de hijos que tiene. Las posibilidades de una casa de un Plan de Viviendas son a un mínimo de dos años y las urgencias llevan a tener una para dentro de 15 días. Es difícil que alguien le alquile el tipo de hogar que necesita, salvo que tuviera mucho dinero junto para asegurarle a los dueños.
Analía y su hija mayor, de 7 años, que tiene dos hermanitos varones más grandes, que cuidan la casa muchas veces.
Analía tiene tres hijos más: Tomás Quiroga (12), Juan Bautista Quiroga (10) y Delfina Belén Quiroga (7). La madre gasta los 3.000 pesos de las asignaciones familiares en pagar el alquiler que tiene hasta hoy en día y para alimentarlos tiene que vender productos. Definitivamente, una tarea exhaustiva y casi imposible de realizar si se le agregan las dificultades de ir y venir del hospital y de hacer decenas de trámites, con todos los chicos alrededor.
*Videos de la entrevista, al cierre de la nota
Violeta, internada en la terapia Neo del Htal. Vicente López y PlanesAnalía tiene que entrar a la terapia de Neonatología a ver a Violeta con el dolor de dejar a su otra bebé llorando afuera y luego retirarse, haciendo lo mismo con la beba internada. Ambas tenían apenas 30 semanas de gestación cuando Analía padeció las incesantes hemorragias a raíz de su Colestasis.


