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Seguridad Destacado Seguridad 3 MAY 2017

La odisea del padre de los chicos abusados y maltratados por Darío Badaracco

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Juan Ángel Rojas vive en General Rodríguez y había denunciado ya en 2015 al hoy acusado de asesinar a Araceli Fulles. La causa era por abuso sexual sobre su hija de, en ese entonces, 3 años de edad. Su otro hijo, de 5, le había confesado que el hombre lo golpeaba. Hoy lleva cinco meses sin verlos, según le dijo a un medio nacional.

Darío Badaracco (29) está en boca de todos por ser el principal acusado del asesinato de Araceli Fulles, la joven de 21 años que estuvo un mes desaparecida y apareció muerta y desnuda en el fondo de una casa de José León Suárez.Días atrás, trascendieron los antecedentes penales del imputado, entre los que apareció un caso de abuso ocurrido en 2015 cuya víctima habría sido una nena de tres años de edad que es la hija de su actual pareja, Claudia Guzmán. La denuncia la radicó el padre, Juan Angel Rojas, vecino de General Rodríguez, en la Comisaría Primera luego de que la niña le confesara lo ocurrido. Fue asistida en el Hospital Vicente López donde confirmaron los hechos y se constató también que el otro hijo que tiene en común con Guzmán, de 5 años en ese entonces, presentaba lesiones. Más allá de la insistencia de Rojas, la fiscalía terminó archivando la denuncia porque Badaracco y Guzmán negaron los hechos. En diálogo con la señal televisiva TN, el padre de los nenes involucrados aseguró haber temido lo peor cuando se enteró de la noticia de Araceli. "Se me vino el mundo abajo. Sabiendo que mi hija seguía, después de haber hecho la denuncia, viviendo ahí con él (por Badaracco) pensé que primero había sido mi hija y después me quedé en blanco porque no sabía cómo reaccionar", dijo. Y agregó: "Luche muncho en la justicia para que se esclarezca y escuchen lo que vivía mi hija. La madre hacía oído sordo, al igual que la justicia, y nunca pensé que este hombre podía llegar a esto". Recordando aquel episodio en que comenzó a sospechar del abuso de Badaracco sobre su hija y los golpes sobre su hija, relató: "Por el régimen de visita, yo los iba a buscar a mis hijos los fines de semana. Cuando me fui a trabajar, la nena se levanta diciendo que le dolía la vagina, que le ardía. Quien me avisó de esto fue mi actual pareja y al hablar con mi hija me dijo 'Darío me toca el agujerito. Me metió el dedo y un palo'".

Además, también reveló que la nena le había contado que cuando la madre "se iba a comprar", el acusado del asesinato de Araceli le pegaba a su otro hijo "para que se calle".

Tras la denuncia, Rojas contó que pudo tener a sus hijos durante tres meses, aunque encontró impedimentos en la Justicia. "El juzgado de General Rodríguez me decía que tenía que ir hasta José León Suárez porque el hecho había pasado ahí. Se tiraban la pelota uno al otro y no me ayudaban, tampoco me dieron una respuesta. Además me trataban de hostigador porque yo presenté las pruebas de que Badaracco y mi ex pareja me amenazaban por Facebook diciéndome que me iban a quemar la casa".

Hoy, el hombre asegura que lleva cinco meses sin ver a sus hijos luego de que Guzmán fuera a retirarlos un día del jardín de infantes. A partir de ahí no los volvió a ver y tampoco sabe donde están.

"Me dijeron que no los podía ver porque no podía entrar al domicilio, que se encontraban ahí. Desde ahí no supe más nada, no sé dónde está la madre, no tengo un teléfono para hablar con ellos. La justicia no me dice si voy a volver a verlos".
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