N. Ruiz: "Pueden decirme que encabece otro, y no hay problema, pero si me ponen, voy a asumir"

 LP: Se están cerrando las listas en estos días. El mayor rumor es que vas a encabezar la lista de este año. ¿Es oficial?

Seguramente estaré en la lista, los compañeros lo han decidido y los sectores de Cambiemos. En muchas reuniones me han transmitido que sería interesante que apostáramos a un lugar como mujer dentro del Concejo Deliberante.

Yo estoy acostumbrada a impulsar, a trabajar, empujando desde siempre a mi marido. Me ha tocado estar del otro lado siempre. Jamas podría proponerme. Ha sido por los sectores que están trabajando a la par y quizás ven en mí la representación de muchas mujeres. Trato de manejarlo con la mayor humildad posible. No me creo alguien importante como para señalarme como imbatible en una lista, pero sí reconocen mi trabajo y eso me expresaron mis compañeros.

En política nada está cerrado. Quizás no ocupe el primer lugar. El tema de los lugares no es importante, si lo es que el grupo de trabajo te designe, te reconozca y te diga que tenés que estar.

No, ni quiero saberla. Quizás me llevo una sorpresa pero también pueden decirme que encabece otro, y no hay problema. No tengo ninguna pretensión política, estoy feliz en el lugar en el que estoy.

Además de una representación, de estar en el Concejo Deliberante, participar de las sesiones, y ayudar en sacar ordenanzas, cosas tan importantes en las que quizás nos ponen palos en la rueda por no tener la mayoría que necesitamos. Más allá de eso, creo que no cambiaría mi forma de trabajar. No podría levantarme más temprano de lo que me levanto, ni irme más tarde a dormir, ni estar más fines de semana en cada actividad. Estaré donde el equipo crea que tengo que estar. El que me conoce sabe que no tengo esas pretensiones.

Me acuerdo cuando Darío asumió en 2013 como concejal. Siento que él siempre estuvo preparado, siempre sabía las cosas. Empezó muy preparado, se destaco mucho dentro del Concejo. Es un estudioso nato.

Los conocimientos, desde ingeniería y administración, los supo bajar a quienes los tenía que bajar a quienes los tenía que explicar. Los proyectos de comunicación, de ordenanza, los guardabamos en el estudio de ingeniería, me explicaba que era cada cosa. Ahora los recibimos ahora varias veces, preguntando lo que se va a tratar. Es una noción importante que uno aprende día a día.

Y después está el escuchar a los vecinos, estar abierto a las propuestas, saber lo que quiere y necesita la gente de la ciudad. Eso también es innato. No podría querer ser concejal si no conociera mi ciudad, la expectativa de la población.

No me pone nerviosa la exposición, soy natural. Digo lo que siento y voy evaluando en mi trabajo. De la misma manera que hablo ante una cámara, le hablo a la gente. De ahí a que después se invente... Si hay algo que le reconozco al kirchnerismo es que haya enseñado esa objetividad a la hora de leer los medios. Es importante que le gente no sólamente lo que lee o escucha en la radio considera verdad. En estos momentos de campaña es donde más se puede inventar cualquier cosa de uno. Sabe escuchar la gente, se pregunta si será cierto lo que se dice, piensa un poco más, interpreta las críticas como opositoras o como totalmente negativas con el fin de dañar.

No, eso es en el mundillo político que se generan esas situaciones. Tampoco salgo a aclarar. No le doy interés. Me quita mucho tiempo. Escuchar la radio no puedo, por ejemplo.

Fueron circunstancias del momento y del lugar que uno ocupa. Diste el ejemplo de El Vecinal pero debe haber molestado al comerciante que nunca pagó y pase el inspector que le quiera cobrar tasas adeudadas. Fue puntualmente porque se trató de un medio de comunicación. Uno está en un lugar donde no todas las decisiones son políticamente agradables para todos. Uno está acá para hacer cumplir con determinadas cuestiones de ordenar la ciudad, pero no tiene que ver con la relación. No hay nada personal acá.

Muchas veces se hizo política diciendo "no te mando los inspectores o modifico una ordenanza para que vos me apoyés o te hago un registro trucho".

No, pero queda en el mundillo político. Recortan una palabra y queda fuera de contexto. Si, por ejemplo, hablaba de abusadores y con calificativos no muy correctos sobre determinadas situaciones, las recortaban y la pegaban arriba de otro tema que no tiene nada que ver. Eso igual no le llega a la gente. Lo tomo natural, como parte del juego político y de la democracia. No hay nada de eso que me lastime, salvo que se metan con mis hijos. A ellos igual les hablo, y les digo que puede ser duro eso.

Dependerá mucho de la inteligencia de los legisladores. Puede llegar a pasar que quieran distorsionar. Es el juego de la democracia. Yo lo entiendo de esta manera. Si el pueblo quisiera que esté en el Concejo representándolos, y yo voy a hablar por ellos y defenderé la postura, siempre pensando en la ciudad.

Al común de la gente no le importa lo que pasa en el Concejo y el chicaneo político, el chismerío, que sale en la contratapa de los diarios. A mí me pasaba. Cuando era chica, mi mamá nunca venía a la Municipalidad, no sabíamos quienes eran los concejales, ni con quién se peleaban. A la gente le interesa que le solucionés con obras, y si no podés, que estés, que los atiendas.

Hicimos un encuentro anual de la mujer y había dos mil mujeres, y no les solucioné todo, ni les conseguí una casa, ni un auto, ni terreno, ni les salvé la vida a sus hijos. Pero en algún momento yo las atendí, en algo estuve, las fui a visitar, comparti algo con esas mujeres. Esa es la visión que queremos dar de la política.

Omar "Poli" Caballero tiene que estar. Es un gran trabajador. Es un gran trbajador, ama lo que hace, da todo.

Sí. Si me ponen en ese lugar, creo que tengo que estar.

No quita que esté al lado de mi marido atentiendo a los vecinos. Puedo tener mi oficina en forma independiente y atender desde las 5 de la mañana acá. El Secretario Privado estaría atendiendo con nosotros. Puedo hacer las dos cosas a la vez.

Veo una gestión a fondo. No paramos nunca. El equipo de Planificación de Obras, el de Desarrollo Social, van a toda máquina. Hay situaciones que son difíciles de sacar adelante. Lo mismo de siempre, la gente sabe: desinversión de muchos años. Cuesta que se vean los resultados. Hay 8500 cuadras de tierra y hemos arreglado 2500 en este año y medio, pero nos falta todo el resto. O hacés 600 cuadras de asfalto, uno de los planes que se llevan adelante, como se hizo la calle Chaco y como se van a hacer Arroyo Correntino de Marabó, la 92 de Villa Arrarás, Corsini de Parque Rivadavia. Esas las mirás en el mapa y son rayitas chiquitas entre tantas calles sin asfalto ni mejorado.

Ves las cloacas y vamos a hacer todo Los Viveros, que durante años y años lo pidieron. Hoy lo hacemos pero abrís el mapa y es un barrio pequeño en relación a la ciudad entera. Pero también ves que hacemos en Villa Vengochea que es un barrio grande, pero la gente está muy ansiosa. Quizás los hospitales que estamos haciendo generan mayor impacto porque ya se los ve levantados y próximos a ser equipados. Pero también la gente va al hospital y lo ven feo de afuera, y estamos metiendo mucha plata también con la Provincia de Buenos Aires. Hay mucha ansiedad. En estos cuatro años la gente va a ver un poco del cambio, pero no se va a solucionar todo.

Miguel Domañski, secretario de Planificación de Obras, durante la presentación de un proyectos de agua y cloacas. Estos proyectos que se hacen desde la Secretaría de Planificación de Obras, esta gran idea de dividirla. Antes teníamos un Secretario de Obras y Servicios Públicos. ¿qué podía hacer el mismo tipo que se encargaba de cambiar una lamparita a un vecino del fondo de un barrio y también pensar en un proyecto de nivelación, prueba de suelos para hacer asfaltos? No se hacía esos proyectos, porque no existía esta Secretaría de Planificación de Obras. Te lo pueden decir hasta los mismos empleados. Hay un equipo maravilloso. Se complementó con ingenieros y técnicos, hasta con asistentes sociales.

Nadie puede decir de las personas que estuvieron trabajando con nosotros, que no se hayan respetado los acuerdos. Ocuparon cargos de acuerdo a la capacidad de cada uno. Uno tiene una expectativa de esa persona cuando ingresa a trabajar. Un año fue un tiempo suficiente para analizar y decir "bueno, no cumpliste con las expectativas" y ahí se termina todo acuerdo. Acá no tiene que ver la amistad ni la relación. Estas son funciones públicas y hay que darle respuestas a los vecinos.

Hay que demostrar que quién no esté a la altura de las circunstancias se tiene que ir y dejar espacio a una persona que quizás venga con más ganas, energía. Se le da a entender a los funcionarios que esto no es una situación de perpetuidad tener una función pública. Se lo dijimos desde el inicio, que quien no esté preparado a trabajar en forma full time como funcionario... Dedicarse a la atención, a la gente, tenés que tener sensibilidad y decisión de hacerlo, no podés trabajar a medias.

Ha pasado que funcionarios se sentaran en su oficina, y haya pensado que tenía una situación de poder, y no cumpliera con las expectativas. Está acordado de antemano, nadie se puede asustar por que le digamos que tenga que dejar el cargo.

Siempre pueden seguir los cambios.

La estabilidad no te la dan los funcionarios, te la da la gente. No pasa que una persona te arrastre el voto y la mentalidad de cientos de personas.

Tenemos nuestra agrupación desde que asumimos esta gestión, en Mariano Moreno y Pedro Whelan. Ahí no hay funcionarios ni nada, somos todos iguales.

 LP: Cuando la gente plantea algo, ¿se puede mencionar algo que hayan planteado? Que se diga, que un vecino planteó algo y a partir de ello se hizo una modificación en la gestión. Se habla de cómo se toman las críticas también.

Vos no podés esperar que la gente te diga que estás divina, que te felicite todo el tiempo. Quizás la mayoría de la gente que te cruzás te apoya y agradece, pero nunca falta el que dice, por ejemplo, "Darío, arreglame la calle por favor". Pero te lo dicen bien. Y enseguida agarrás el teléfono para darle prioridad a un vecino que no había podido salir por la lluvia o el barro. En los foros de vecinos también se transmiten muchas cosas. Gente que pide que se refaccione la Plaza Central, un vecino que vive enfrente de ella, en una reunión de uno de los foros, recuedo que había dicho que ya se había hecho arreglos y la plaza continuaba en malas condiciones porque se acumulaba barro en unas bajadas del piso. Y ahi mismo es cuando otros pedían "Kubar, ¿y si le hacés un cordoncito?". La gente te da ideas y nosotros las tomamos.

Otras cuestiones que te comentan de cambios de mano de una calle, los proyectos del Polideportivo donde se van a reparar los baños, el corredor para que la gente no camine por el mismo lugar donde van las bicicletas. Esas cosas les importan a la gente. Los cambios de funcionarios y eso, no.

Ojalá no sea una campaña agresiva, por lo menos no como cuando arrancó el año. Quiero pensar que hemos evolucionado un poco. Pensar que ni bien empezamos nos agredieron y nos quisieron desestabilizar con aquel episodio de la multisectorial. Quiero pensar que todo se va a dar dentro del juego democrático, que a la gente no le sirve andar eschando que tal o cual es una porquería o una basura.

No sé porque no sé quién se va a presentar. No quiero hablar mal de la interna de ellos. Hay tanta gente que no puedo ver la estrategia que van a planificar. De este lado de Cambiemos, uno los ve con mayor claridad. Del otro lado se ve mucha gente queriendo ser. Igual es una legislativa, donde no creo que se jueguen tanto a fondo. Vamos a brindarle a la gente una linda propuesta.

No sé bien los porcentajes. Necesitamos cuatro, cinco o seis. No sé, no tengo experiencia en elecciones siendo gobierno. Yo tengo fe en que la gente nos va a acompañar. Creo que le cambiamos mucho la cara a Rodríguez. Nuestra vida está dedicada a la función pública.

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