En el Barrio Almirante Brown se encontró un murciélago con rabia, que causó estupor en los vecinos.
La situación sanitaria no da de parabienes, a los conocidos casos del COVID-19 y dengue, debemos sumarle una situación poco usual, pero que en diversas circunstancias pasa desapercibida. Y se trata nada menos, que de un murciélago que se encontraba con rabia. El hecho ocurrió en los últimos días en el barrio Almirante Brown, cuando una vecina encontró al mamífero, ya sin vida en el patio de su casa, y se comunicó inmediatamente con el área de Zoonosis, que una vez enterado de la situación, decidió analizar al animal.
Los resultados arrojaron que poseía rabia, tras los datos de zoonosis urbanas de Avellaneda, por lo que se realizó el protocolo preventivo de vacunar a las mascotas de la casa y en el radio de 200 metros a la redonda desde el lugar donde se encontró al mamífero. Así mismo diversas fuentes fidedignas expresaron que el mamífero no tuvo contacto con ninguna mascota ni con ninguna persona de la zona. Pero el control de foco se realizó igual, como método para evitar cualquier contratiempo, dada la presente situación sanitaria local, provincial y nacional.
Según manifestó la encargada del área, Bárbara Gagno “por suerte se pudo realizar la vacunación a la mayoría de las mascotas. Hubo casas en las que se negaron a abrir sus puertas ya que no estamos en la mejor época para realizar esta actividad. Pero esto también es salud pública y lo teníamos que realizar para prevenir el contagio de rabia a los animales y a las personas”, sentenció la directora.
Otra enfermedad que, si bien no genera los mismos recaudos y cuidados intensivos que la pandemia presente, se debe tener en cuenta, porque afecta a personas y animales y es de fácil contagio: “cualquier contacto con una especie sensible a la rabia como, por ejemplo, un rasguño profundo con hemorragia y una lamedura sobre piel y mucosa y en un lugar donde está presente la rabia debe tratarse con precaución”, expuso tiempo atrás la OMS. 
