En las últimas horas trascendió más información de la causa por el crimen de José María Palavecino, el hombre de 40 años cuyo cadáver fue encontrado enterrado en un descampado. Su autopsia reveló que fue apuñalado y se habría desangrado, además de sufrir un paro cardíaco. Fuentes familiares y periodísticas aseguran que habría sido enterrado vivo.
Paro cardíaco, shock hipovolémico (pérdida grave de sangre) y herida punzocortante en la vena cava inferior. Esos datos arrojó la autopsia de Palavecino, según los papeles que fueron acercados a La Posta Noticias. Sin embargo, distintos medios nacionales y provinciales informaron de acuerdo a versiones de fuentes judiciales que la víctima habría sido golpeado con una pala en la cabeza y que posiblemente habría sido enterrado vivo.
Además, otro dato aportaría que la muerte del hombre se habría producido en la madrugada del 5 de septiembre. El supuesto que se manejaba en la investigación era que Palavecino había ido a la casa de la mujer detenida, Nancy, imputada por el crimen y que, según el medio Telefé Noticias, se negó a declarar ante la fiscal Alejandra Rodríguez de la UFI N°9 pese a que, según comentaron desde el entorno de la víctima "confesó en la Comisaría en la madrugada del jueves 24 de septiembre".
Fuentes consultadas desde el entorno de Palavecino manifestaron que "Fue ella quien dio a la policía el dato de donde estaba enterrado el cuerpo", y que por eso "hubo allanamiento pero no rastrillaje, fueron directo al lugar donde estaba el cuerpo".
La familia de la acusada aseguró que la denuncia por el supuesto abuso se realizó contra el tío del chico y el hombre que terminó asesinado, cuestión que rechaza la familia de la víctima fatal, que habrían circulado que esa denuncia sólo contenía el nombre del tío del adolescente que dijo ser abusado y que el homicidio podría tener otro móvil.
Vale recordar que como saldo de todo esto, hay dos detenidos (dos hermanos, una mujer, Nancy Elizabeth, por el homicidio y su hermano, por la denuncia de abuso) y una persona brutalmente asesinada.
