El animal tiene 6 años y había sido rescatado de un circo ambulante. El caso podría coincidir con el cierre del Zoológico de Luján.
A mediados de agosto, se conoció la historia de Kenai, un oso pardo que se encontraba en cautiverio en General Rodríguez y que había sido rescatado de un circo ambulante. Tiene 6 años y estuvo al borde de la muerte debido a la carencia de recursos y espacios para vivir.
Con intervención del Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible de la Nación, el animal fue liberado bajo la voluntad de la persona que lo cuidó en el último tiempo. Así, Kenai llegó a Tekove Mymba, un santuario de animales ubicado en Colón, Entre Ríos.
La cartera conducida por Juan Cabandié contó cómo fue el traslado: “Efectivos del Escuadrón 6 ‘Concepción del Uruguay’, brindaron apoyo a la Brigada de Control Ambiental del Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible Nacional en el rescate de un oso pardo adulto que se encontraba privado de su libertad”.
Y sobre Kenai, se detalló: “Se trata de la especie protegida "ursus arctos" que se encuentra en la lista de la Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestres (CITES), que quedará a resguardo en el recinto de la fundación para animales, institución que albergará por primera vez a un oso de dicha especie”.
Una nueva entrega voluntaria para el cuidado de la fauna: un oso pardo fue trasladado a un santuario. pic.twitter.com/it0xS0xBNy
— Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible (@AmbienteNacion) August 14, 2021
La historia del oso pardo que se encontraba en cautiverio en Gral. Rodríguez
Según el portal entrerriano El Entre Ríos, Kenai nació en condiciones precarias y estuvo al borde de la muerte. De hecho, él nació junto a un hermano, que no pudo sobrevivir. Con dos días de vida, fue alimentado cada tres horas y puesto en lámpara de calor las 24 horas. Milagrosamente salió adelante y llegó a adulto.
“Ahora faltaba la parte más difícil: conseguirle un buen lugar donde vivir. Esto llevó como 5 años, hasta que por fin se puedo realizar un recinto de casi dos hectáreas en Tekove Mymba y así darle un espacio digno sin necesidad de viajar al exterior en busca de santuarios”, comentó Juan Manuel Paccot, responsable del santuario, al citado portal.
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“Es la primera vez en la Argentina que un oso pardo es trasladado a un santuario propio, en lugar de mandarlo fuera del país”, destacó el biólogo sobre el procedimiento que tuvo lugar a mediados de agosto.
La historia de Kenai estaría vinculada al reciente cierre del Zoológico de Luján, ubicado en la zona limítrofe entre nuestro distrito y la localidad vecina.
