Enojo con la Justicia de la familia de la rodriguense atropellada en Luján, quien lucha por recuperarse
María de los Ángeles Videla (49) está internada en el sanatorio Güemes de Luján desde el viernes 29 de octubre pasado, cuando esperaba el colectivo en un barrio de aquella ciudad y un auto conducido por un conocido empresario lujanense la atropelló y huyó.
El hecho ocurrió en Ruta 47 entre 542 y Ramón Falcón, en el acceso al barrio Luna, y la rodriguense, que es vecina del barrio San Martín, quedó con las piernas "atrapadas" contra el paragolpe del vehículo, un BMW 328i. Según testigos, el conductor, Luis Guillermón (45), dio marcha atrás y luego avanzó acelerando hasta darse a la fuga.
Desde aquel día, la víctima está internada. Primero fue al Hospital Municipal de Luján y luego la derivaron a la clínica Güemes, donde se encuentra actualmente. Vive un verdadero calvario, dado que su familia debió iniciar una colecta solidaria para reunir los $237.000 que necesitan para pagar la prótesis y los clavos endomedulares que le colocarán en una cirugía que le realizarán pronto y de la que depende para poder volver a caminar.
"Nos ayudaron mucho del country donde trabaja ella y familiares, conocidos, vecinos, hemos recibido donaciones, hemos hecho rifas. La gente es muy solidaria y estamos juntando el dinero", comentaron desde la familia.
Enojo con la Justicia
En paralelo, familiares y allegados de María de los Ángeles Videla hicieron una manifestación pacífica frente a la clínica Güemes de Luján donde se encuentra internada. Allí, reclamaron justicia por lo sucedido y que le caiga el peso de la ley a Luis Guillermón, que luego de chocarla huyó, abandonó el auto y fue hospitalizado por una lesión grave en su cabeza. Curiosamente, se encontraba internado también en la clínica Güemes.
Este lunes 14 de noviembre, también volvieron a manifestarse en el lugar donde ocurrió el siniestro vial y los seis hijos de la mujer rodriguense volvieron a pedir que el empresario vaya preso.
"Hacia el final de la manifestación, nos dijeron desde la clínica que a Guillermón le dieron el alta y se fue a su casa, sin custodia. Queremos justicia", remarcaron desde el entorno de María, quien "todavía está en la cama de un hospital peleándola como una guerrera mientras este señor está en la casa".
