Jorge Molina, vecino rodriguense y ex oficial de la Policía Federal que fuera atacado por motochorros el jueves 19, fue derivado a un centro de alta complejidad.
Su familia vive horas de mucha angustia tras el violento episodio este vecino oriundo del barrio La Ermita. Si bien hubo pequeños avances en cuanto a su cuadro, este sábado 21 fue trasladado al Hospital Churruca, ubicado en la calle Uspallata al 3400 de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. Este centro permitirá llevar a cabo intervenciones más complejas de acuerdo a lo que su cuadro de salud le exige.
La Posta Noticias pudo hablar en exclusiva con Sara, pareja de Jorge, quien señaló que "hay cosas que en el Hospital Vicente López no tenían por la complejidad. Lo peor está en la vejiga, lo que más destruyó. Sigue comprometido, por eso lo derivan, necesita que lo traten en un lugar de alta complejidad. La cirugía de urgencia permitió que esté estable pero todavía sigue con un pronóstico muy reservado".
Con la voz entrecortada por ese dolor atragantado que todavía no comprende qué sucede, la mujer explicó que "de la causa no se acercaron más , no me dijeron más nada pero ahora no me interesa. Luego si sigue habrá que buscar a los culpables porque él solo fue a caminar como todos los días y le pasa esto. No le robaron porque tenía el celular en la mano ya que iba hablando con un compañero, todas las tardes hace lo mismo en el mismo horario".
Sara se tomó un instante para contar con detalles cómo vivió ese momento en que se enteró de esta triste situación: "Él lo que me dijo porque estaba consciente en el piso cuando llegué fue ´me pegaron un tiro ma y se fueron´. Que eran dos en moto y tenían chaleco. Sabía que eran dos personas, dijo que lo vieron y gritaron únicamente antes de disparar, sin intentar robarle ni nada. El compañero que hablaba con él dijo que le llegó a decir que le pegaron un tiro y ahí se cortó la llamada y me llamó a mi".
Jorge vive hace tiempo en el barrio La Ermita junto a Sara luego de que hayan decidido mudarse desde Lanús a General Rodríguez hace ya muchos años. Es padre de cuatro hijos con un matrimonio anterior pero que dos de ellos se mantienen fuerte y acompañan en este difícil contexto. "Somos dos personas grandes, no jodemos a nadie. Yo soy discapacitada. No tenemos enemigos, acá los vecinos saben que él se da con todos, si puede ayudar ayuda. No es conflictivo, siempre trata de mediar. Este lugar era un paraíso, por eso nos venimos para acá, por la tranquilidad. Ahora se fue de las manos".
Cómo fue el ataque a Jorge
De acuerdo a la información oficial brindada, caminaba frente a la Iglesia de Fátima en la Colectora Norte cuando fue sorprendido por dos hombres en moto que le pegaron un balazo en la zona baja del abdomen y luego huyeron. No le robaron nada, solamente lo agredieron y al ver lo que provocaron decidieron por darse a la fuga.
Esa misma noche del jueves 19 fue fue intervenido en el quirófano, ya que la bala perforó la pared de la vejiga. El daño provocó un sangrado interno que fue lo que se encontraron los médicos al operar, por lo que en primera instancia se intentó estabilizar la situación y buscar más lesiones que, por suerte, no habrían encontrado fuera de la trayectoria.
El expolicía permaneció en todo momento en estado de coma farmacológico inducido bajo una sedación absoluta. Su cuadro es sumamente delicado y es asistido mecánicamente para respirar. Habrá que esperar si la nueva atención en un centro especializado para su cuadro puede aportarle una salida a esta situación.
