Interna en Atilra: Mario Chávez y Claudio Cisneros denuncian que Heber Ríos los quiere “humillar”

Los "retadores" por la conducción del gremio se hicieron presentes en el estudio de La Posta TV durante la última emisión de Contame La Posta.

La interna en Atilra Seccional General Rodríguez no tiene fin. Y las fiestas de fin de año fueron evidencia de ello. Por un lado, se llevó a cabo la fiesta organizada por la conducción local del gremio, con Heber Ríos a la cabeza, y por el otro, la de la oposición al secretario general, con Mario Chávez y Claudio Cisneros, quienes aspiran a tomar los hilos del sindicato a partir de 2025, quienes denunciaron que del lado del oficialismo buscan “humillarlos”, además de “poner la interna política por encima del bienestar de los trabajadores”.

Chávez y Cisneros, representantes de Atilra Logística La Serenísima, se manifestaron en estos términos durante la última emisión de Contame La Posta por La Posta TV.

Cisneros manifestó: “Esta lucha es más complicada (que cuando llegaron al sindicato). El poder tiene un poco más de fuerza. Es un desafío muy grande. Ir por todo es ir a darle una mano a los trabajadores que no se sienten representados por la comisión que está hoy en la seccional. Hoy estamos como oposición y no estamos haciendo un trabajo gremial junto a la seccional, como lo veníamos haciendo durante años”.

En tanto, Chávez remarcó: “El eje de todo esto es que por pensar diferente, por creer qué es lo correcto de cómo es el manejo o el camino de un sindicato, que sólo pasa por una persona sin ningún tipo de consenso, hoy nos cuesta a tal punto de que nos quieren llevar a otro tipo de escenario, a humillaciones”.

Fue entonces que trajo a colación el tema fiesta de fin de año. “La diferencia que nosotros marcamos en esta fiesta es que llevamos a los trabajadores y a las trabajadoras y a sus respectivas familias. A mí no me importa llenar el predio para una foto con 3.000 personas. Para mí, es la fiesta que hace un sindicato, una comisión de delegados, dirigentes sindicales, que reciben el aporte de los trabajadores. Entonces, hay que hacer la fiesta para ellos”, subrayó Chávez.

Además, expuso a Ríos: “Nuestro excompañero se jacta de decir que no va a ocultar, que le gusta la militancia política. No digo que haya que ocultar eso, el tema es el uso y abuso del manejo del sindicato y el puesto que ocupás”.

“Nos quiere hacer quedar como que no nos interesa el interés de los trabajadores o que no tenemos que dar una opinión desde lo político o qué camino es más favorable para el gremio y el bienestar de los trabajadores”, cuestionó el aspirante a secretario general de Atilra Seccional Gral. Rodríguez.

En esta línea, puntualizó: “El derecho del laburante es primordial para nosotros y en eso marcamos la diferencia, porque no esperamos tener un gobierno de turno favorable para lograr derechos ni tampoco consensuamos o acordamos con la empresa sobre si le voy a pedir tal cosa tal día porque me sirva políticamente”.

Por su parte, Cisneros denunció que en la fiesta organizada por Ríos “un afiliado tuvo que pagar su entrada, la de su hijo, la de su esposa, la de su mamá”, mientras que el conductor gremial “trajo 900 personas invitadas, de la política, de las agrupaciones, y sin pagar entrada”. “¿Por qué hace eso? Si ya que le vas a dar gratis una fiesta a 900 personas que no pertenecen a Atilra, dásela a tu trabajador también”, se quejó el compañero de Chávez.

Luego, Chávez denunció que desde la seccional local de Atilra le soltaron la mano, al dejarlo sin los viáticos para poder costear los gastos para la fiesta. “Nos quedamos sin los viáticos, sin la plata para devolver, para pagar, pero nos quedamos con algo que para nosotros vale más: mostrar cómo se está manejando el sindicato”, expuso el dirigente gremial, quien volvió a hablar de una “política del miedo” en medio de la interna.

“Hoy estamos separados (de Ríos) porque él decidió que la política iba primero antes que el trabajador”, subrayó Chávez.

En esta línea, sentenció: “No queremos que esto sea un River-Boca ni entrevistas de políticos en campaña, pero necesitábamos expresar que nos duele mucho que nos quieran humillar”.