
Una vendedora ambulante de Malvinas sufrió el robo de su moto pero logró recuperarla de forma increíble
A Gabriela Fuentes, quien hace 15 años se gana la vida vendiendo churros a bordo de su moto por la zona de Malvinas y aledaños, tres jóvenes delincuentes y armados le robaron su rodado este domingo por la tarde. Sin embargo, como necesitaba cargarle nafta, la huida se vio frustrada tan solo unos cuantos metros después y la dejaron abandonada
Una vecina, actualmente residente del barrio Bicentenario, pero que pasó toda su vida en Villa Vengochea, fue víctima de un hecho de inseguridad este domingo aproximadamente a las 18 hs, aunque por cuestiones del azar puede decirse que terminó teniendo un final feliz.
Gabriela Fuentes desde hace 15 años se dedica a vender churros, principalmente en la zona de Malvinas, pero también por arterias neurálgicas del distrito como Corrientes, Gaona, Trueba, Tucumán y Delfi de Ortega. Y lo hace de forma ambulante a bordo de su moto, lo que hace que sea reconocida por una amplia cantidad de vecinos rodriguenses, al menos del sector este del distrito.
Pero cuando se encontraba culminando su jornada laboral de ventas, fue abordada por tres jóvenes delincuentes, de los cuales uno estaba armado con un arma de fuego, quienes la amenazaron para robarle la moto Euromot modelo 2010 de su propiedad en José Ingenieros entre Ranchos y Don Bosco, según lo que denunció en la Comisaría 2º.
"Más allá de armados o no, el susto no me lo saca nadie. Yo me asusté y no me resistí, entregué mi herramienta de trabajo que es mi moto, la cual después dejaron abandonada, ya que justo en ese momento estaba yendo a la estación de servicio Shell, de ahí nomás porque debía cargar nafta. Así que gracias a que no tenía la suficiente nafta la dejaron abandonada", resumió en declaraciones a La Posta Noticias.
Apenas dos cuadras, hasta Intendente Colobraro, duró el escape de los malvivientes, quienes inmediatamente salieron corriendo "porque los vecinos los salieron corriendo. Gracias a eso y la alarma vecinal que dio muy buenos resultados, todo salió bien. Los mismos vecinos después me acercaron la moto. La verdad, unos valientes", destacó.
El video que acompaña esta nota es del momento previo al robo y se muestra a los tres delincuentes circulando por la calle José Ingenieros. "Estoy triste porque suceden estas cosas, los robos a ciudadanos laburantes que quieren progresar. Yo soy madre, abuela, docente", señaló Gabriela.
Tras el episodio delictivo, agregó que "llamé a mi marido inmediatamente por teléfono y me acompañaron a la comisaría Segunda de Malvinas. Por cierto, el patrullero después de la situación me escoltó hasta la estación de servicio para cargar nafta", aunque lo que más lamentó es que "mi idea era terminar de vender, cargaba nafta y tenía que pasar a ver a mi papá que tiene 76 años, y estaba esperando que pase a dejarle unos remedios porque se engripó. Pero no pude llegar".
Para finalizar, la vecina de barrio Bicentenario evidenció con sus palabras el esfuerzo que diariamente realiza junto a su marido para salir adelante y por eso con más razón la bronca por el robo: "nuestra churrería nació desde la necesidad de tener un trabajo allá por el 2006. No teníamos trabajo con mi marido, nos pusimos a mirar los clasificados en el diario y leímos un anuncio de un curso de fabricación de churros. Entonces me seguí capacitando para tener un trabajo que me pudiera sustentar económicamente", indicó Gabriela que al mismo tiempo se encuentra estudiando en el Instituto Superior de Formación Docente N.º 155 y tiene una rica historia familiar porque su abuelo construyó las escuelas Primarias N.º 15 y N.º 19 de General Rodríguez, así como la Sociedad de Fomento de Malvinas y el Destacamento del mismo barrio.