La provincia de Buenos Aires podría quedar fuera del Sistema de Información Tributaria Nacional debido a su negativa a adherir al nuevo Régimen Simplificado de Ganancias impulsado por el Gobierno nacional.
La Agencia de Recaudación y Control Aduanero (ARCA) anunció un nuevo convenio de intercambio de información con las provincias, en el marco del Plan de Reparación Histórica de los Ahorros de los Argentinos. La medida, que busca incentivar el uso de dinero no declarado, condicionó el acceso a datos tributarios a la adhesión de las jurisdicciones al régimen.
El gobernador Axel Kicillof y el director ejecutivo de ARBA, Cristian Girard, han manifestado su desacuerdo con estas medidas, argumentando que la provincia mantendrá sus propios controles fiscales y no cederá competencias tributarias.
¿Qué implicaría la exclusión?
Según informó la Agencia de Recaudación de la Provincia de Buenos Aires (ARBA), las provincias que no se sumen al nuevo régimen perderán el acceso a información clave sobre facturación y movimientos económicos de los contribuyentes. Esta información es esencial para detectar maniobras de evasión y realizar controles cruzados entre los distintos niveles del Estado.
Para General Rodríguez, esta desconexión podría traducirse en:
- Menor capacidad de fiscalización: sin acceso a datos nacionales, el municipio tendría más dificultades para identificar inconsistencias fiscales.
- Reducción en la recaudación: la falta de información podría dificultar la detección de evasores, afectando los ingresos municipales.
- Desigualdad en el control tributario: mientras otras provincias acceden a información detallada, Buenos Aires y sus municipios quedarían en desventaja.
Fuente: El Cronista
