
Fiesta del Día del Periodista con discurso, expectativas y promesas de mejoras en camino a 2026
Pese a que no se realizó sobre la fecha exacta, el festejo, que hoy en día es el único que se organizó para agasajar a la prensa en su día, contó con la presencia de colegas de múltiples medios locales, regionales y personal de Prensa Municipal. En ese marco, el intendente y el secretario de Prensa y Comunicación, Sebastián Piccardo, hicieron un repaso de la situación actual y hablaron de las expectativas de llevar mejoras para el 2026.
Un paso al frente en lo discursivo
A un año de lo que fue un bizarro festejo del Día del Periodista, repleto de reproches y calificativos y marcado por una desorientación total respecto de la era en la cual se vive y los problemas que afrontaban los medios locales, el ejecutivo municipal logró hacer algunos cambios pequeños pero importantes en bajar de aquella rama a la cual se había subido (apenas con mejores modales que la del Presidente de la Nación) y quizás justamente para tratar de diferenciarse de lo obvio, se buscó un approach un poco más sano desde al menos lo discursivo.
Ya lejos de aquel discurso caprichoso de 2024 donde se mencionó más la mala praxis y la mala leche que los avatares y dificultades de una profesión absolutamente diezmada y amenazada por múltiples frentes, esta vez el secretario de Prensa y Comunicación del Municipio fue mucho más elegante y cauto en las palabras, propositivo y hasta decoroso en destacar la dificultad de navegar economías como la actual para quienes tienen (ya no el deseo, sino el coraje borderline con desorden psíquico) de animarse a sostener un medio local, mientras recordaba sus épocas marcando el rumbo diario al frente del semanario El Vecinal.
Épocas de vacas y gallinas flacas y algo de violín para el reporte económico
Si bien se notó la crisis en que el menú fue de gallinas aún menos ejercitadas que en 2024 y el postre volvió a repetir elección autodescriptiva de actitudes del gobierno durante el año previo (sí, no cesaron completamente los consejos a privados de no sustentar medios críticos, ni varios cortocircuitos para evitar dar información o que se brinden los funcionarios para las notas), al menos hubo un sorteo de premios, promesas de una celebración de mayor nivel y reconocimiento y anticipo de próximas mejoras en las mega devaluadas pautas de difusión (venían de un 88% de caída real en los últimos 4 años para todos).
Al Zar, lo que es del Zar, hace muchos años que todas las demás instituciones que hacían algo por el día de esta actividad, han dejado de convocar u organizar algo. Quedó esta sola.
El intendente pasó a dar su reporte anual de las arcas que bien podría haber sido acompañado de violines y banderas a media asta, desde ya, con el justificativo constante que significa la carta Milei, algo así como una carta de Monopoly para cuando se pasa por el lugar de "prohibido estacionar".
Podríamos entrar a detallar otros números de esas arcas y dónde sí hay más dinero, pero no era el marco y como que ya se estiraba bastante ese segmento político que el intendente acostumbra a dar, casi como un reporte de gestión o semi apertura de sesiones con balance de medio término.
Expectativas y gestiones
Piccardo dijo que la idea es ir colaborando con el esfuerzo de los medios locales en un año de este nivel de crisis (reconociendo la insistencia de la organización periodística de dar con avances diversos) y ante la idea de su subalterno Guillermo hasta se mencionó la idea de hacer una entrega de premios anual para 2026, tema complicado si los hay en rubros de almas y orgullos sensibles como el mediático, así que esperemos que sea más para reconocer, que para romper, con lo poco que hay y lo mucho que costó la integración.
Nobleza obliga, si bien no fue parte del discurso, hubo charlas a comienzos del año para desarrollar la idea de una regulación de la pauta que sirva para encuadrar los emprendimientos y que no sigan quedando los valores a criterio del dedo del funcionario o la gestión de turno, algo que daría mayor igualdad, transparencia y libertad para el futuro de la actividad. Quizás hizo falta alguna mención más a mejoras de procesos de transparencia y acceso libre y simple (on line) a la información (véase decretos, por ejemplo), algo que realmente está a años luz de un estado aceptable.
Mejor onda y expectativas desde la organización
La mejor noticia fue siempre el encuentro feliz entre colegas, la participación de muchos jóvenes (tanto periodistas, productores, operadores, Prensa Municipal y en general la familia de los medios locales) y que la presencia por primera vez de una organización como AMPyCO, con el reconocimiento oral de las autoridades, puede abrir paso a un diálogo más franco, directo y preventivo de cuestiones que han precipitado la caída de muchos medios o de su desarrollo en un momento que es más desafiante que nunca, al menos, para el periodismo privado e independiente.
Como la media nuez sobre el postre vigilante, elegimos ver la mitad llena y valorar la construcción de otros ámbitos con la claridad de que la unión y la convicción hacen la fuerza y que al menos, en ese menester, tenemos por delante momentos auspiciosos que dependerán de los que trabajamos en esta actividad, luchar por propiciar.