Mientras actualmente hay más de 50 muertes por un envenenamiento masivo en todo el país que responden a intoxicaciones por fentanilo mal procesado, la investigación avanza abriendo paso entre influencias políticas y narcotráfico. En las últimas horas, se reveló un dato que involucra a General Rodríguez
El brote de infecciones por fentanilo contaminado en hospitales argentinos ya causó al menos 52 muertes y 76 casos confirmados en cuatro jurisdicciones. La investigación judicial apunta al laboratorio Ramallo S.A., parte del grupo HLB Pharma, por la distribución de los lotes afectados.
Mirá la presentación del caso en Contame La Posta
La cifra de fallecidos fue confirmada por fuentes judiciales tras las primeras pericias químicas y sanitarias que detectaron contaminación bacteriana en las ampollas de este potente analgésico, utilizado habitualmente en quirófanos y unidades de cuidados intensivos en contextos hospitalarios.
El Ministerio de Salud de la Nación, en su último Boletín Epidemiológico Nacional publicado este lunes, informó que se detectaron 76 contagios confirmados vinculados al fentanilo adulterado. El brote afecta a 19 establecimientos médicos distribuidos en la Ciudad de Buenos Aires, la provincia de Buenos Aires, Neuquén y Santa Fe, aunque no se descarta que puedan sumarse nuevos casos en las próximas semanas.
Lo cierto es que, según consigna La Nación, hay 3000 dosis producidas en el Laboratorio Ramallo y en HLB Pharma repartidas en tres lotes de 1000 cada una que todavía no se sabe dónde están. La Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (ANMAT) confeccionó 180 infracciones en el laboratorio y jamás se lo clausuró sino hasta la tragedia de las muertes que, en mayo pasado, se sucedieron en el hospital Italiano de La Plata.
Droga desaparecida y la pista de Gral Rodríguez
Según Sedronar, en marzo pasado se constataron cuatro kilos de citrato de fentanilo en las instalaciones de HLB Pharma, en San Isidro, y otro kilo y medio en la planta de Ramallo. Pero en mayo, tras las primeras muertes ocurridas en el Hospital Italiano de La Plata, la Justicia allanó los laboratorios y no encontró rastros del material. El fentanilo había desaparecido.
Semejante irregularidad generó que la Justicia ya no sólo investigue las muertes sino también que empiece a enderezar la hipótesis hacia la posibilidad de que haya narcotráfico.
Cada kilo de esta sustancia tiene el potencial de matar a 500.000 personas. De ese modo, los cinco kilos perdidos representan una amenaza para más de 2,5 millones de vidas. A pesar de esta gravedad, los responsables siguen en libertad y la investigación judicial avanza con lentitud.
Los hermanos García Furfaro, dueños de los laboratorios y de un entramado empresarial extendido, aseguran haber destruido las ampollas y la materia prima. Para ello, presentaron documentación de una empresa de residuos peligrosos, MD Servicios SRL. Sin embargo, los documentos muestran fechas posteriores a la orden de no innovar emitida por la ANMAT, lo que compromete aún más su versión.
Es aquí donde entra en escena General Rodríguez como parte fundamental de esta trama, ya que testigos dejaron entrever que los propios García Furfaro solían llevar ese material de un lugar a otro en sus camionetas. Incluso, ex empleados de la firma aseguraron que una mañana, durante la época de pandemia, trasladaron cosas con destino a unos galpones ubicados en el kilómetro 46 del Acceso Oeste, donde son propietarios de la empresa Cables Epuyén (foto).
Respecto a esta firma, se la menciona "como una de las tantas que conforman un notable entramado societario y comercial de los García Furfaro", donde con una formidable planta de galpones, figura como gerente titular de la sociedad Damián García Furfaro desde agosto de 2022. Además, se agrega que la empresa arrastra enormes deudas de impuestos y cargas sociales impagos y tiene gran parte de su cartera crediticia en situación 5 con una acreencia del Banco Credicoop de alrededor de 570 millones de pesos.
No son pocos los trascendidos, siempre según diario La Nación, que consideran que en este predio de General Rodríguez podría haberse guardado el fentanilo. Incluso se mencionan camiones de la empresa Tres Arroyos (dedicada al rubro alimentos y cereales) que habrían cargado pallets de ampollas antes del operativo judicial, y dichos camiones habrían salido para Rodríguez, donde habría quedado la mercadería en los galpones.
La DEA (agencia antinarcóticos de Estados Unidos), que colabora con la investigación, considera que la magnitud de lo desaparecido excede cualquier uso médico nacional y solo podría tener como destino el mercado negro, donde carteles internacionales son los principales compradores.
El fentanilo, 100 veces más potente que la morfina, es una sustancia de altísima regulación internacional. Sin embargo, en Argentina fue importado en plena pandemia sin controles efectivos, según alertaron organismos internacionales. Una trama oscura en una investigación extensa que vuelve a poner en escena a General Rodríguez, como en otros tiempos...
Fuente: 0221