
Cómo sigue el chico brutalmente agredido en la escuela de barrio Güemes y cuál es el pedido de su madre
Otro grave episodio de violencia escolar que conmociona a General Rodríguez, luego de que un adolescente de 14 años fuera brutalmente agredido por un compañero de 16 dentro de un aula en la Secundaria N°9 del barrio Güemes. El joven, identificado como Agustín, debió ser trasladado de urgencia al Hospital Vicente López con graves lesiones que aún requieren atención especializada, y sobre esto último habló en el último programa de "Contame La Posta" su mamá Stefani Miranda, que requiere de la ayuda de la comunidad
El ataque ocurrió el pasado jueves 7 de agosto en la Escuela Secundaria N°9, ubicada en la calle El Chañar entre Arenales y Blas Pascal. La madre de Agustín, Stefani, relató los angustiantes momentos tras ser alertada por otro alumno de la escuela que le dijo: "está en el baño sangrando". Al llegar al establecimiento, la mujer encontró a su hijo en Preceptoría. "Mi nene estaba en preceptoría con el ojo peor de lo que está en la imagen, tenía un tacho de basura con la mitad casi llena de papeles con sangre", fue lo primero que aseveró en "Contame La Posta" desde los estudios de La Posta TV.
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Mirá acá la entrevista con la mamá del joven golpeado
La respuesta inicial de las autoridades escolares fue cuestionable, según la madre. Denunció que tuvo que exigir que llamaran a una ambulancia, ya que la preceptora priorizaba que firmara el retiro de su hijo para llevarlo a casa y visitara al médico al día siguiente. "Llamen ya a una ambulancia o que el padre del chico se haga responsable y me pague un remís, porque yo salí con lo puesto o sea no saqué el celular ni la SUBE, nada", relató Stefani Miranda que pidió. Y agregó: "me decía que firme el retiro y que lo lleve a mi casa y que mañana lo lleve al médico y le dije 'no ves como está el nene, no lo puedo llevar a mi casa, llamame ya una ambulancia o pagame el remís, pero el nene tiene que ser asistido'".
Finalmente, fue una profesora de biología quien llamó a una ambulancia desde su teléfono particular, y Agustín fue trasladado al Hospital Vicente López para recibir atención médica.
Las lesiones de Agustín fueron de suma gravedad. Una vez en el hospital, los cirujanos informaron a Stefani que su hijo tenía "un coágulo de sangre y me decían que sí o sí lo tenían que dejar en observación para controlar que ese coágulo no vaya al cerebro, porque si no estaríamos hablando de otra situación". Además, detalló que su hijo "tiene la órbita del ojo roto, tiene el huesito que va a la nariz también lo tiene quebrado, el tabique desviado, lo hicieron mier... perdón la palabra".
La madre explicó las limitaciones para el tratamiento de su hijo en el Hospital Vicente López, que no cuenta con el especialista necesario. "Necesita un cirujano maxilofacial, pero no me explicaron que necesitaba un cirujano maxilofacial que se ocupe del traumatofacial, porque son tres", contó. La situación diaria de Agustín es de dolor constante y sufre de visión reducida, con un ojo que "se le va" y diferentes colores en la visión. Existe la preocupación de que se le pueda "provocar una cápsula con moco y le puede perforar el tabique", añadió. Los traslados para su atención en Capital Federal son un calvario y un gasto significativo, ya que debe tomar remís, tren y otro remís o taxi para llegar al Hospital de Clínicas.
Respecto a cómo sucedió el ataque, Agustín le contó a su madre que estaba jugando con la hermana del agresor cuando éste ingresó al aula y lo atacó. El agresor, de 16 años, le propinó tres golpes de puño en el rostro, interpretando que Agustín estaba molestando a su hermana, a pesar de que ellos eran conocidos e incluso jugaban a la pelota los fines de semana. Sin embargo, los cirujanos indicaron que las lesiones de Agustín parecían haber sido causadas con algo más que solo los puños, como una manopla.
La conducta del agresor tras el hecho fue aún más indignante para la familia. Porque se enteraron que al día siguiente, el chico se mufaba con sus compañeros del aula de "que le había reventado la cara a piñas y sangraba". La escuela tomó medidas, y el agresor fue expulsado y, según se sabe, está ahora en otra institución. Sin embargo, la familia del agresor no se ha comunicado con la madre de Agustín para ofrecer disculpas o ayuda.
Stefani, quien es madre de tres hijos y se encuentra separada, atraviesa una situación muy difícil. "Me arruinaron la vida completamente con esta situación", afirmó. Además, Agustín tiene autismo, lo que agrava la preocupación de su madre. "Mi nene tiene autismo, o sea no es un nene agresivo, todas las profesoras, preceptores, saben que es muy tranquilo Agus. Entonces todos se sorprendieron con la situación porque Agus es un nene súper tranquilo", reiteró.
El adolescente está preocupado por sus estudios y no quiere repetir o llevarse materias, lo que llevó a su madre a exigir a la escuela que le pasen la tarea. "Lo mataron a trompadas dentro de la escuela y encima hay que ir a exigir de que pasen la tarea, mínimo", lamentó.
Ante la difícil situación económica y la falta de apoyo, Stefani ha comenzado a organizar rifas para cubrir los gastos. Para quienes deseen colaborar, el alias de su cuenta para recibir ayuda es agustín.gauna08.mp.
La comunidad de General Rodríguez y especialmente las autoridades competentes, tanto de salud como de educación, sería fundamental si pudieran intervenir para garantizar el bienestar de Agustín y abordar la creciente violencia en las escuelas, un problema que, según se ha observado, carece de un seguimiento adecuado para los menores involucrados.