Ecología 27 SEP 2025

Las dos razones del fallido operativo de la peregrinación a caballo y una advertencia de SOS CAN para el retorno

Compartí en las redes

La reconocida proteccionista Teresa Buldorini, experimentada en muchas peregrinaciones a caballo previas, de las que eran mucho más complejas y participante de incontables reuniones este año para evitar los peligros clásicos de estas jornadas, ha sido muy dura con dos fallos graves, el de Seguridad de la Provincia de Buenos Aires y Tránsito Municipal. Pero además, advirtió "cuidado con la vuelta y con los controles por el alcohol que llevan algunos". 

El Municipio de Gral Rodríguez había puesto un acuerdo con SOS Can y Equus, dos Organizaciones No Gubernamentales que son las únicas bien constituidas que participan en nuestro distrito de manera orgánica una participación o un rol en el trabajo de controles de cara al paso de cientos o miles de personas que asisten a la peregrinación a caballo a Luján cada año.  De la organización participaban los municipios, las ONG y la Provincia y se abordaba en nuestra ciudad con las áreas de Zoonosis, Tránsito, Policía Rural, Patrullas de Seguridad y otros elementos de assitencia.

Había puestos en varios puntos, como Moreno, Morón, Merlo, Ituzaingó y Gral Rodríguez y se preveía una serie de controles más rigurosos que los habituales, incluso con un flyer municipal que circuló anticipando que nadie iba a poder pasar con carros por el distrito y además la directora de Zoonosis, Bárbara Gagno, declaró en consonancia lo mismo, sin embargo, muchos vecinos los vieron pasar en estos días y reclamaron al respecto. En esta nota repasaremos algunas cuestiones sobre qué pasó para que falle parte del operativo.

La buena: no hubo muertes ni caballos malheridos al momento

A la noche de este sábado, no hubo caballos reportados heridos ni muertos y la mirada general es que "bajó bastante la participación a lo que era otros años, aunque no dejaron de ocurrir algunas situaciones muy mejorables y algunos fallos cruciales en la organización, principalmente del tránsito y de la permisividad con los llamados "carreros".

Lo que más falló ante la expectativa de los anuncios

El Ministerio de Seguridad es el que falló en brindar el operativo ajustado a lo dispuesto y planificado, siendo que aportaron ellos personal y caballos de Quilmes, dado que la mayoría vienen de Zona Sur.

Sin embargo no vino ni la cantidad de personal de Provincia, ni en la disponbilidad temporal que se esperaba. La desorganización y falta de personal, cree Buldorini que fueron clave en que gran parte del problema, que en este año, se sufrió en un goteo de toda la semana, cuando los puestos de control recién se colocaron el jueves. Para colmo, cuando se esperaba que se cumpliera a rajatablas lo de no dejar pasar carros, trascendió el viernes que "el intendente Botto dijo que pasen todos los carros", lo cual alteró lo que faltaba del plan original.

Tras la orden desde Luján, todos los carros pasaron y muchos vieron que no se cumplía lo que había adelantado Gagno al respecto, pero en este caso, la definición se habría tomado en Luján, con la idea de que el desfile no sufra tantas bajas de carros. El límite entonces se puso en que sean carros de ruedas de madera para el desfile y no de ruedas de goma.

La disposición del campamento:

En el puesto de Granaderos (límite con Luján) se armó un gran campamento con todo lo necesario para incluso esperar la vuelta como se solía hacer. En ese puesto los hacían tomar agua, los guiaban al camping de Luján que quedaba cerca del aeroclub de la ciudad vecina, ubicado del lado Norte de la autopista, para que no se pierdan en el camino o se deriven por lugares no autorizados.

Desde allí debían salir el domingo hacia el desfile para volver a casa, o volver hacia el camping y volverse el lunes, lo cual lleva a pensar que las posibles dificultades que puede haber en el retorno, estarían cubiertas. 

El camping de Luján alberga a la mayoría de las organizaciones gauchas y tradicionalistas, en lo que sería lo más manejable. Dentro del camping incluso se iban a prohibir ciertos "juegos" con caballos que los solían agotar antes de emprender la vuelta.  

Sin embargo, hay una duda de que esto efectivamente pase y temen los proteccionistas que todos vuelvan por Ruta 7 con el caos que esto supone: los más irregulares, los "carreros".

Los "carreros":

La fuerte preocupación de los proteccionistas respecto del abuso del alcohol y los muchos que aún siguen sin cuidar a los animales apropiadamente son el foco. Esto puede ser mucho peor a la vuelta, donde ya han pasado accidentes graves sobre las rutas por falta de iluminación y gente que pasa borracha por accesos cruzándose en el camino o complicando todo, además a veces, topándose con automovilistas también imprudentes de los que salen de tomar alcohol a la salida de boliches el domingo por la madrugada. Se vieron pasar algunos caballos muy flacos y muchos lograron evadir los caminos de los controles, así que esos son una incógnita para la vuelta, pero en una participación mermada, se espera que no sea un caos demasiado alto.

Tránsito, la deuda que sí tuvo el Municipio:

Según lo que aportó Buldorini, se podría resumir que si estuviéramos en un país normal, deberíamos tener un Estado que toma la cuestión desde la Zona Sur, interviniendo la Provincia con los municipios donde todo esto se origina y por ejemplo, frenar esto desde Quilmes, para no tener que actuar los proteccionistas o municipios. 

Todo saldría mejor y más ordenado si Luján termina de reglamentar esto y no sigue sacando un decreto o anotando los participantes la misma semana de la peregrinación, y si la gente de Quilmes hace algo al respecto (habrían participado de las reuniones), pero según Buldorini dijeron que es "imposible", siendo que hasta intervino una ONG de Quilmes que protege a los caballos.

"Es por eso no se puede culpar en esta al municipio local, porque acá lo que falló es la Provincia y la articulación", porque esto "sería más fácil si no fuera que agarran allá a todos esos caballos que estuvieron juntando cartones o basura toda la semana y los sacan a peregrinar de golpe el viernes", aclaró la proteccionista.

Botto sacó el decreto del desfile, donde dice todo lo que debe ser, pero mucho de esto no se cumplió, las patrullas rurales iban a intervenir y eran las únicas que podían pedir papeles, más las patrullas rurales junto con los veterinarios prepactados. Sin embargo, el operativo fue mucho menor a lo esperado por parte de la Provincia y eso se notó.

Hubo mucha gente que vino violenta y se puso a amedrentar a los que estaban en los controles. A Bárbara Gagno la incomodaron en el puesto de Zoonosis, junto al Hospital de Zoonosis y en el momento en el que pasó, estaba sola con muchos controles a la vez en esa discusión.

"No se puede repetir del mismo modo"

Según afirmó Teresa, "habrá una reunion pronto para establecer qué pasó bien y mal, pero a priori, Buldorini fue clara en que si bien es muy dura con el área de Zoonosis en general, en esta ocasión el mayor problema vino por parte de Tránsito y de la Provincia, que fallaron en acción o por diseño. La frase de cierre fe contundente: "El año que viene esto no se puede repetir del mismo modo".