Violenta agresión en un bar del barrio Escasany: atacaron a los dueños y empleados tras irse sin pagar

Tremenda situación acontecida durante la noche del sábado. El caso quedó registrado y muestra el momento exacto en el que los agresores arremeten contra los dueños y el personal del comercio ubicado a escasos metros del límite con el casco urbano de General Rodríguez.

Una violenta pelea se desató este sábado por la noche en el local gastronómico Le Tite Club, ubicado en avenida Italia y Los Pinos del barrio Escasany, en el límite con el casco urbano de General Rodríguez, cuando tres hombres atacaron a los dueños y empleados del comercio tras una discusión. El tenso y dramático momento duró poco más de 10 minutos, hasta que llegaron efectivos policiales luego de varios intentos de comunicación al 911. Todo quedó registrado en una filmación.

Según consta en la denuncia policial radicada en la Comisaría Primera de nuestra ciudad, el hecho ocurrió alrededor de las 23:20 horas de este sábado, mientras la propietaria, A. J., se encontraba trabajando junto a su esposo, G., y su equipo.

Todo comenzó cuando un mesero, identificado como L., advirtió que tres clientes -que habían estado tomando cerveza- se retiraban del lugar sin abonar la cuenta y llevándose los vasos. Patricia relató que salió a la vereda junto a su pareja y les gritó a los hombres: “¡Váyanse, no les voy a cobrar la cerveza, se los regalo!”.

Sin embargo, los agresores regresaron al local de forma violenta, arrojando vasos que hirieron a los presentes. La comerciante sufrió un corte en el dedo meñique y su esposo resultó lesionado en el rostro.

Uno de los repartidores del lugar, identificado como F., intentó intervenir para ayudar a G. “Tomé un palo para intentar separarlos, pero estaban totalmente agresivos”, indicó A. J. en su testimonio.

Los agresores se retiraron y volvieron a ingresar minutos después, arrojando mesas y sillas dentro del local.

Finalmente, unos 10 minutos después y tras varios intentos de comunicación al 911, la Policía logró detener a uno de ellos, que se había escondido a unos 20 metros del comercio, mientras los demás escapaban.

Según la denuncia, el detenido habría amenazado con prender fuego el bar antes de ser trasladado.

“Nos dijeron que iban a volver para quemar todo”, denunció la dueña del establecimiento, quien aseguró no conocer a los atacantes.

El hecho fue caratulado como “Lesiones, daños y amenazas”, y quedó bajo investigación judicial del Departamento Judicial Moreno-Gral. Rodríguez.