“Le faltaba la cédula verde, motivo de remisión de los vehículos, pero nos dijo si podíamos esperar y 20 minutos después apareció la madre con la cédula”, se excusó el secretario de Inspección General, Comercio, Tránsito y Control Urbano, Emanuel Juárez, en diálogo con medios colegas. Dijo que hace falta un sistema para poder ver si los conductores están inhabilitados.
Días atrás, el secretario de Inspección General, Comercio, Tránsito y Control Urbano municipal, Emanuel Juárez, un abogado de 33 años y vecino de General Rodríguez que sucedió en el área a Miguel Puentes tras su escandalosa salida, se refirió el último sábado a un polémico control vehicular realizado en nuestro distrito al mediático Elián Valenzuela, más conocido como L-Gante.
Consultado sobre el caso por los colegas Raúl Nieto (‘Nada es Gratis’ por La Posta TV) y Paulo Ciruzzi (‘Retratos Hablados’ por FM VIVA 96.9), Juárez manifestó que “no hay mucho para decir”.
A Nieto le comentó: “Fue un control vehicular más. La persona exhibió su documentación y no había irregularidades en lo que presentó. Se demoró el control porque le faltaba la cédula verde. Él dijo que el auto es de titularidad de su madre, ella se presentó al rato, exhibió su cédula y se lo dejó seguir circulando”.
A Paulo Ciruzzi le puntualizó: “En este control en particular, él (L-Gante) presentó la documentación que tenía; sí, le faltaba la cédula verde, que eso sí es motivo de remisión de los vehículos, pero nos dijo si podíamos esperar a que se acerque la madre que es la titular. Esperamos 20 minutos, apareció la madre, exhibió la cédula y no hay mucho más para decir. Lo dejamos seguir circulando, él presentó registro de conducir vigente".
Así se justificó el funcionario: “No estamos interesados en sancionar al vecino de nuestra ciudad u otras por cuestiones nimias”.
Pero eso no es todo, pues, L-Gante, a pedido de la Agencia Nacional de Seguridad Vial y con el aval del Gobierno bonaerense, estaría inhabilitado para conducir por usar el celular y no llevar cinturón. Sin embargo, Juárez, aseveró que “el Municipio no estaba notificado de que tuviera una inhabilitación”.
Es más, consideró que “hubo muchos entredichos sobre que estaba inhabilitado”. “Supongamos que hago oídos a ello y tomo la decisión de que se le secuestre el vehículo y después él no está inhabilitado, yo estaría en problemas por tomar una decisión arbitraria, cuando estos procedimientos tienen que ser objetivos e imparciales”, se excusó el funcionario.
Llegó a remarcar que desde el área a su cargo consultaron con el Juzgado de Faltas N.º 1, sobre cómo continuar con el procedimiento. E insistió: “Eso no está notificado en el Municipio”, tras lo cual volvió a excusarse: “El problema es que no tenemos un sistema de acceso inmediato para que los inspectores puedan corroborar si está habilitada o no una licencia”. “Vamos a tratar de ver cómo lograr implementar este sistema para que esta situación no vuelva a ocurrir”, concluyó.