El debate por la calidad del agua en la provincia de Buenos Aires se intensifica luego de que el organismo que nuclea a las provincias cuestionara la metodología del relevamiento que ubicó a General Rodríguez en "alerta rojo". Es que, en las últimas horas, el Consejo Hídrico Federal desautorizó el 'Mapa del ITBA' por "falta de rigor científico"
El panorama sanitario en Argentina respecto a la calidad del agua ha sido sacudido por la controversia que rodea al "Mapa del Arsénico" elaborado por el Instituto Tecnológico de Buenos Aires (ITBA). Este monitoreo, que el organismo lleva a cabo desde hace 14 años, había encendido las alarmas al confirmar que General Rodríguez es uno de los 16 municipios con niveles de arsénico considerados peligrosos, superando los 50 microgramos por litro (ppb), el límite máximo establecido por el Código Alimentario Argentino (CAA). Según el ITBA, por ejemplo el partido de General Rodríguez registró 67 ppb, ubicándose en la categoría de "semáforo rojo".
Sin embargo, el Consejo Hídrico Federal (COHIFE), conformado por el Estado nacional, la Ciudad Autónoma de Buenos Aires y todas las provincias, ha emitido una dura respuesta, declarando que el informe del ITBA "carece de condiciones científicas, metodológicas y documentales" para ser considerado una referencia válida en la caracterización de aguas subterráneas.
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En una asamblea realizada recientemente, el COHIFE manifestó que la publicación de información de alta sensibilidad social "sin el cumplimiento de protocolos de muestreo, preservación, trazabilidad, verificación de campo, control de calidad analítica, representatividad espacial y revisión científica, puede inducir a conclusiones erróneas en la población y afectar la confianza en los sistemas de provisión de agua potable”.
El principal argumento técnico en contra del trabajo del ITBA es que el material "carece de trazabilidad verificable". El COHIFE detalló que las muestras del mapa fueron aportadas de manera voluntaria por particulares y sin registro de cadena de custodia. Además, se señaló la ausencia de datos cruciales para la validación científica, como las coordenadas precisas, profundidades, tipo de captación, preservantes utilizados, tiempos de traslado y condiciones de conservación.
El organismo federal cuestionó que el propio ITBA haya reconocido no haber efectuado verificaciones en campo ni validaciones de pozos. En resumen, el COHIFE resolvió declarar que el mapa no constituye una herramienta válida para la caracterización hidrogeoquímica, sanitaria o cartográfica de las aguas subterráneas en Argentina. Por su parte, las jurisdicciones que integran el Consejo reafirmaron que el agua que se suministra a la población cumple "estrictamente con los valores establecidos en las normativas vigentes".
El panorama a nivel local
Días atrás, en el programa "Nada es Gratis", el Director de Política Ambiental municipal, Germán Tamagni, ya había intentado poner paños fríos a la alarma generada por el mapa del ITBA. Tamagni "desmintió" que General Rodríguez estuviera enteramente en "Zona Roja".
El funcionario precisó que el mapa del ITBA contiene solo tres valores cargados para General Rodríguez y, de acuerdo con su análisis, "los tres puntos de Rodríguez que hay son los tres de agua de pozo, no hay de red". Tamagni explicó que el agua de red, al pasar por procesos de filtración, "debería tener parámetros aptos para consumo".
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Reconoció, no obstante, que la problemática existe y es histórica debido a una cuestión geológica, señalando que el lugar más comprometido es "el corredor de la Ruta 5 desde Mercedes". El Director de Política Ambiental también advirtió sobre la dificultad de potabilización, señalando que "el tratamiento de arsénico es muy caro" para las empresas prestadoras, ya que "requiere un tratamiento de ósmosis inversa". En respuesta a la preocupación, el Municipio anunció que tomaría más muestras, específicamente del agua de red, para análisis en colaboración con la Autoridad del Agua.
Los riesgos del arsénico
La preocupación por el arsénico, que es un componente natural del territorio bonaerense, había sido previamente abordada por el Dr. Carlos Colángelo, presidente del Consejo Profesional de Química de la Provincia de Buenos Aires, en "Contame La Posta" meses atrás.
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El Dr. Colángelo calificó la situación de "inconcebible" y declaró un "estado de alerta", poniendo en duda que el agua de red fuera segura, especialmente si presentaba valores altos. El químico fue categórico sobre los riesgos: el arsénico está "demostrado que es un agente cancerígeno en el ser humano" y su ingesta prolongada "produce después de muchos años algunos problemas como ser por ejemplo problemas de cáncer de piel".
Asimismo, recalcó que si bien el arsénico no ingresa por la piel al bañarse, "el problema es el consumo, beberla, ingerirlo dentro de nuestro organismo", incluyendo el lavado de alimentos. Ante la falta de certeza, el titular de Químicos bonaerenses enfatizó "la necesidad de un muestreo serio estadísticamente significativo" en General Rodríguez y otros municipios para dar "tranquilidad a los vecinos". También instó al Estado a asumir el costo de los análisis: "no sería loco que el Estado tenga que meter un pie en esto y costear por sí solo la cuestión".
En síntesis, mientras el ITBA mantiene su alerta basada en datos compilados de pozos particulares, las autoridades hídricas provinciales han descalificado la herramienta por su falta de rigor metodológico y trazabilidad. La ciudadanía, en General Rodríguez y otros distritos, se encuentra en el medio del fuego cruzado, a la espera de un muestreo oficial que disipe las dudas sobre el agua que consumen.
