Según el índice elaborado por la empresa, creció de manera exponencial la cantidad de trabajadores de la plataforma: de poco más de 43 mil a más de 151 mil, en tanto que cayó el tiquet promedio. Se reabre el debate la calidad del empleo y la regulación sobre estas firmas
El número de repartidores que se inscribieron en la firma Rappi aumentó exponencialmente en el último año: un 252 %, pasando de poco más de 43 mil a más de 151 mil. También debe señalarse que el tiquet (promedio) que gastaron los usuarios bajó de manera considerable, por lo que la lectura rápida que se puede hacer en base a estos datos es que se precariza el empleo y que disminuye el ingreso de los consumidores que utilizan estas plataformas para adquirir mercadería de distinta índole.
Es que de acuerdo al denominado Índice Rappi que realiza la empresa, aumentó notoriamente la cantidad de trabajadores en esa plataforma, volviendo a tratarse el tema con preocupación por la precarización laboral. La calidad del trabajo “digital” y la regulación vinculada a ello también se encuentran bajo la lupa.
El Índice Rappi 2025, dio a las claras un dato que reavivó la discusión sobre la plataforma: 151.874 personas que reparten productos hicieron efectivo un pedido este año, mientras que en 2024 completaron al menos una entrega 43.048.
Cabe agregar que este índice se convirtió en un verdadero “termómetro mensual” que hace un relevamiento en tiempo real sobre los movimientos de la economía en cuanto al seguimiento del consumo -de acuerdo a lo que registra en su plataforma-.
Ante el crecimiento de la cantidad de órdenes, el monto promedio por consumo y los comercios activos en la plataforma, otra lectura por parte de analistas de los índices económicos señala que hay claros síntomas de precarización si se tiene en cuenta que hay más repartidores -entre quienes buscan obtener más ingresos y aquellos que eligen esta alternativa laboral debido a la pérdida de poder adquisitivo y quienes intentan no terminar en la informalidad tras perder sus empleos o ser despedidos- pero eso no va de la mano con algo positivo: la cantidad de empleados creció pero cayó el consumo promedio, lo que redunda en menos ingresos para los repartidores (mayor competencia, cae el tiquet promedio, se gana menos dinero por comisiones).
Varios gremios ya han advertido el incremento en el número de trabajadores con ingresos cada vez más bajos y precarización.
Por último, vale indicar algunos datos comparativos entre noviembre del año pasado y el mismo mes de este año: en cuanto a la cantidad de órdenes, creció un 29,3 %; los comercios adheridos alcanzaron una suba del 39,1 % y el tiquet (promedio) trepó a un 21,79 % (menos que el nivel de la inflación).


