Cambia la Tarifa Social desde 2026: quiénes quedan afuera y cómo es el nuevo esquema
La provincia de Buenos Aires anunció una serie de cambios en el otorgamiento de la Tarifa Social de energía para amortiguar las modificaciones que el gobierno de Javier Milei realizará desde enero de 2026 en materia de subsidios a la energía. Según explicó el ministro de Gobierno bonaerense, Carlos Bianco, el fin es “mejorar los criterios de inclusión y exclusión”
A partir de enero de 2026, la provincia de Buenos Aires implementará una transformación estructural en su sistema de subsidios eléctricos para alinearse con las políticas del Gobierno nacional. Esta transición implica el abandono de la actual segmentación de tres niveles (N1, N2 y N3) para pasar a un modelo binario que busca focalizar la asistencia exclusivamente en los sectores de menores recursos, dejando fuera de manera automática a sectores de alto poder adquisitivo y residentes en urbanizaciones privadas.
El nuevo sistema de dos categorías
El esquema que regirá desde 2026 simplificará la clasificación de los usuarios bonaerenses en dos grandes grupos basados en la capacidad económica y el consumo:
• Hogares con subsidio: integrado por familias cuyos ingresos sean inferiores a tres canastas básicas totales. Para este grupo, la asistencia estatal tendrá límites según la demanda estacional: se subsidiarán consumos de hasta 300 kWh mensuales en períodos de alta demanda y hasta 150 kWh en meses de clima templado o menor consumo.
• Hogares sin subsidio: incluye a aquellos con ingresos superiores a tres canastas básicas totales. Estos usuarios dejarán de recibir cualquier tipo de asistencia energética. Este rediseño responde a la necesidad de "adecuar el sistema provincial de subsidios a la nueva política nacional de segmentación energética", según explicó el ministro de Gobierno bonaerense, Carlos Bianco.
Exclusión masiva en barrios cerrados
Uno de los puntos más minuciosos de la reforma es la denominada "depuración del padrón". Según lo anunciado, todas las viviendas ubicadas en barrios cerrados y countries dejarán de recibir subsidios, sin importar la categoría en la que se encuentren actualmente.
Esta medida afectará a aproximadamente 79.500 usuarios en todo el territorio provincial. El desglose administrativo indica que unos 66.900 beneficiarios pertenecen al Gran Buenos Aires (bajo las distribuidoras Edenor y Edesur), mientras que los 12.600 restantes se encuentran en el Interior provincial, en áreas reguladas por el Organismo de Control de Energía Eléctrica de la Provincia de Buenos Aires (OCEBA). Al respecto, Bianco fue tajante: “se van a eliminar todos los subsidios, todas las tarifas sociales a todas aquellas residencias que están en barrios cerrados”.
El rol del OCEBA y la Tarifa Social Provincial
A pesar del ajuste nacional, la administración bonaerense confirmó que mantendrá su propia política de Tarifa Social para los usuarios que se encuentren bajo la órbita de OCEBA. Esto representa un salvaguarda para quienes, aun perdiendo el beneficio nacional por los nuevos criterios de segmentación, cumplan con los requisitos provinciales.
Para conservar o acceder a este beneficio, será indispensable que los usuarios realicen un trámite de reinscripción o recategorización. El ministro Bianco aclaró: “los usuarios que pierdan el subsidio nacional podrán seguir siendo incluidos en la tarifa social provincial, siempre que se registren en la página de OCEBA y cumplan con las condiciones de acceso”. El objetivo primordial de adelantar estos anuncios es evitar que los usuarios se queden sin asistencia de forma sorpresiva por falta de trámites administrativos.
El escenario para el año 2026 proyecta un cambio profundo en la distribución de los costos energéticos. Según informes técnicos, se estima que los usuarios cubrirán, en promedio, el 85,87% del costo real de la electricidad, mientras que el aporte estatal se reducirá apenas al 24,13%.
El golpe al bolsillo será especialmente sensible para los sectores de menores ingresos que anteriormente estaban protegidos por topes más rígidos. Para los usuarios categorizados hoy como N2 (ingresos bajos), el aumento acumulado en la cobertura del costo de la energía podría superar el 410% respecto a los niveles de 2023. Para los sectores de ingresos medios (N3), el incremento proyectado ronda el 383%. De esta manera, el sistema eléctrico se encamina hacia un esquema de "precios reales" con ayudas extremadamente focalizadas.