Luego de una madrugada de Navidad marcada por el descontrol y las denuncias vecinales, la Secretaría de Inspección General, Comercio y Control Urbano desplegó un intenso operativo de seguridad y control durante la noche del viernes 26 de diciembre. La intervención, que se concentró en las inmediaciones de la Plaza Central "Martín Rodríguez", comenzó cerca de las 23 hs y se extendió hasta las 04:30 hs de la madrugada del sábado
Este despliegue surge como respuesta directa al malestar de los vecinos del casco urbano, quienes denunciaron que la madrugada del 25 de diciembre el centro de la ciudad se convirtió en un espacio sin autoridad. Según los testimonios que llegaron a La Posta Noticias, grupos de motociclistas realizaron maniobras peligrosas como "willys" y "cortes", circularon en contramano y consumieron alcohol en la vía pública ante una aparente ausencia total de controles efectivos. Los lugareños describieron escenas de ruidos ensordecedores y suciedad extrema, afirmando que la zona se siente como "tierra de nadie" durante los feriados, a pesar de la cercanía con el Palacio Municipal y la Comisaría Primera.
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Para revertir esta situación, el municipio ejecutó un control vehicular exhaustivo y del espacio público durante la jornada del viernes. En términos de seguridad vial y prevención, el operativo derivó en el secuestro de un total de 8 automóviles y 4 motocicletas, estas últimas específicamente retiradas de circulación por presentar escapes adulterados que generaban ruidos molestos.

Uno de los puntos más relevantes de la noche fue la detección de un motovehículo que contaba con un pedido de secuestro activo por robo; ante este hallazgo, el conductor de sexo masculino fue detenido de forma inmediata y puesto a disposición de la Justicia.

En cuanto a los controles de alcoholemia, se registraron dos casos positivos que llamaron la atención de las autoridades por sus particularidades. Uno de los infractores fue el conductor de una ambulancia proveniente del partido de Ituzaingó, quien además de dar positivo en el test, no contaba con su licencia de conducir al momento de ser interceptado.

Complementariamente, el control del espacio público incluyó la clausura de un kiosco ubicado en la intersección de Avenida España y Moreno. Este comercio se encontraba operando sin la habilitación municipal correspondiente y vendía bebidas alcohólicas y tragos en horarios no permitidos, careciendo además del registro REBA exigido para tal actividad.

A pesar de la magnitud del operativo, trascendió que existiría una creciente tensión entre las áreas municipales y las fuerzas de seguridad. Se supo que existe descontento debido a que los controles locales no estarían contando con el apoyo de la Policía, la cual, según se informó, estuvo ausente durante todo el procedimiento del viernes.

Ante el temor de que se repitan los incidentes de Navidad, el municipio ha comenzado a difundir flyers preventivos para evitar desmanes, ruidos molestos y consumo de alcohol excesivo. El objetivo primordial de estas acciones es garantizar que los festejos del próximo 31 de diciembre se desarrollen bajo un marco de orden y seguridad.
Hacia el final del operativo, cerca de las 04:30 hs, las autoridades informaron que la zona de la Plaza Central se encontraba finalmente en calma y libre de consumo de alcohol en la vía pública.

