Se cumplieron 10 años de una fuga que conmocionó al país tras el Triple Crimen de Gral Rodríguez
Los hermanos Cristian y Martín Lanatta, y Víctor Schillaci, el 27 de diciembre de 2015 protagonizaron una de las evasiones más impactantes de la historia reciente tras ser condenados por el triple crimen de General Rodríguez. Hoy cumplen prisión perpetua y vuelven a estar bajo la lupa judicial por nuevos hechos ocurridos en la cárcel
Se cumplen diez años de un episodio que parece extraído de un guion cinematográfico, pero que desnudó las falencias más profundas del sistema penitenciario y de seguridad argentino. El 27 de diciembre de 2015, los hermanos Cristian y Martín Lanatta, junto a Víctor Schillaci, protagonizaron una de las evasiones más impactantes de la historia reciente al escapar del penal de máxima seguridad de General Alvear. Sin embargo, para entender la magnitud de este hecho, es necesario retroceder a la base de su condena: el sangriento triple crimen de General Rodríguez.
En agosto de 2008, el hallazgo de los cuerpos de los empresarios farmacéuticos Sebastián Forza, Damián Ferrón y Leopoldo Bina marcó un punto de inflexión en la historia del crimen organizado en el país. Los tres ejecutivos, vinculados al comercio de precursores químicos, fueron secuestrados, torturados y ejecutados. Sus restos aparecieron en un descampado de General Rodríguez, dentro de un automóvil abandonado, en un escenario de claro ajuste de cuentas.
Este caso expuso por primera vez el trasfondo del tráfico ilegal de efedrina en Argentina, generando un impacto político y judicial que aún hoy es citado como un antecedente clave del avance del narcotráfico. Por estos homicidios, los hermanos Lanatta y los hermanos Schillaci fueron sentenciados a prisión perpetua.
La fuga de 2015 ocurrió pocos días después del cambio de gobierno nacional, sumergiendo al país en un clima de extrema tensión política. Aquella madrugada, los detenidos salieron caminando de la Unidad 30 vestidos con supuestos uniformes penitenciarios y armados con una pistola de madera, tomando como rehén a un guardiacárcel para huir en un Fiat 128. Cabe destacar que Marcelo Schillaci, el cuarto condenado, no participó de la huida por encontrarse internado en un hospital.
Lo que siguió fue un raid de 1.360 kilómetros que mantuvo en vilo a varias provincias. Durante quince días, los prófugos:
• Robaron vehículos y secuestraron personas, incluido un ingeniero agrónomo en Santa Fe.
• Se enfrentaron a tiros con fuerzas federales y provinciales.
• Balearon a dos policías en Ranchos, dejándolos gravemente heridos.
La cacería humana terminó en la zona de Cayastá, Santa Fe. Martín Lanatta fue el primero en caer tras un vuelco y un intento de escape a pie; dos días después, Cristian y Víctor Schillaci fueron capturados en un campo arrocero, exhaustos y deshidratados.
El presente: nuevos crímenes tras las rejas
A diez años de aquel escape, los protagonistas continúan bajo un régimen de detención extremadamente estricto. Martín Lanatta se encuentra en el Módulo VI del Complejo Penitenciario Federal de Ezeiza, un sector para presos de "alto riesgo" donde pasa 20 horas diarias en su celda y tiene contacto telefónico limitado.
Sin embargo, el nombre de los Lanatta ha vuelto a los tribunales por hechos recientes. Actualmente, tanto Martín como Víctor Schillaci enfrentan una nueva acusación por el homicidio de un interno ocurrido dentro del penal de Ezeiza en diciembre de 2024. Además, a Martín se lo vincula con maniobras de tráfico de armas junto a Mario Segovia, conocido como "El Rey de la Efedrina". Por los delitos cometidos durante la fuga, sumaron condenas adicionales que van desde los 7 hasta los 10 años, reafirmando una estancia de por vida tras las rejas.
Fuente: Diario Popular / Noticias Argentinas
