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Lucas Morales, de 24 años, estuvo en coma tras un accidente en el kilómetro 46 de la autopista. Si bien su estado aún es delicado, el joven ya logró despertar y hasta respirar sin necesidad del respirador artificial.
Se dirigía a su trabajo cuando una camioneta lo chocó, a fines de abril, en un confuso hecho sobre la Colectora Sur del Acceso Oeste. A partir de allí, Lucas Morales (24) quedó en coma y fue internado Clínica Modelo de Morón (por su ART) con un edema cerebral y unos primeros prónosticos médicos no muy favorables. Hoy, a poco más de tres semanas del hecho, su familia tiene motivos para esperanzarse. Lucas salió del coma, logró despertar y hasta consiguió respirar sin ayuda del respirador artificial del que dependió durante varios días. Y fueron días muy difíciles para él y su entorno. Debió atravesar una traqueotomía que hasta hoy no le permite hablar y una cirujía en el cráneo para retirarle líquido. Aún lo mantienen sedado para evitar que se altere, por lo que el pronóstico sigue siendo reservado y lo mantiene en Terapia Intensiva. La mejoría fue leve pero para la familia es un impulso muy fuerte. "Los primeros partes eran muy dolorosos ya que desde un principio lo daban con muerte cerebral. En una entrevista médica los especialistas del INCUCAI ( Instituto Nacional Central Único Coordinador de Ablación e Implante) lo vinieron a ver y ahí cambió el panorama. Sólo iban a dar una sóla respuesta: si estaba vivo o muerto y lo declararon vivo", comentó a La Posta un hermano de Lucas. Y agrega: "El la está peleando, es una lucha del día a día". Aún debe superar un proceso largo de recuperación, porque debe dar respuesta a la evolución que pretenden los médicos, que tienen como prioridad el hecho de que mejore la movilidad y los reflejos, así como también el tema de la respiración, algo que está en camino, ya que aunque usa el respirador artificual, lo hace porque "no lo fuerzan sin necesidad pero saben que puede respirar por sus propios medios", dice el hermano de Lucas. Y cuenta que aunque aún no ha alcanzado los reflejos mostrados por el joven para cambiar el pronóstico de los médicos, ha generado esperanza: "Yo sé que él despertó, me miró y me apretó la mano". En cuanto a la investigación policial, el hermano de Lucas asegura que "no ha habido novedades" en el hecho.Notas relacionadas