Seguridad 21 DIC 2022

Crimen del hincha de Luján: la Justicia revocó una decisión sobre tres de los acusados

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Esta semana, la Justicia emitió un fallo revocando una decisión que había tomado sobre tres sujetos imputados por el asesinato de Joaquín Coronel, el chico de 18 años que murió de un balazo en los incidentes que se produjeron en el clásico entre Luján y Alem el 10 de julio de este año en el Campo Municipal de Deportes de la vecina ciudad.

El juez de Garantías, Marcelo Romero, resolvió que tres de los acusados de la causa, identificados como César Ramírez, Hugo Prezzo y Carlos David Capellani, vuelvan a estar tras las rejas. Es que casi dos meses después del crimen, los había beneficiado con prisión domiciliaria y, tras la apelación del abogado de la familia de Joaquín, Juan Pablo Merlo, ahora revocó esa decisión y ordenó que continúen detenidos en una celda mientras avanza la investigación.

Entre los fundamentos de este fallo, el documento explica que "que aquella tarde del 10 de julio, Carlos David Capellani bajó del auto Chevrolet Prisma que conducía César Ramírez y comenzó a hacer ademanes a un grupo de hinchas del club Luján que estaban sobre la avenida Pellegrini, a cincuenta metros de la calle Moreno. Y que luego se dirigió a un automóvil Audi A3 "conducido por Hugo Prezzo, quien le entregó "un elemento ofensivo, que por la manera de tomarlo se trataría de un arma de fuego -de puño- con la que se dirigió hacia la parcialidad de Luján que se encontraba en la misma zona de avenida Pellegrini y comenzó a efectuarles disparos, tras lo cual volvió a subir al auto".

Detalla la resolución que el magistrado "tuvo por probado que Capellani contó con el apoyo que le prestaron los conductores de los automóviles Chevrolet Clasicc y Audi A3 (Ramirez y Prezzo, respectivamente), conduciéndolo y retirándolo del lugar el primero y facilitándole un arma de fuego cargada, el segundo".

Y que considera "Carlos Daniel Capellani, probable autor penalmente responsable de los delitos de lesiones leves y lesiones graves calificadas por ser cometidas con arma de fuego, agravadas por ser cometidas en el marco de un espectáculo deportivo, resistencia a la autoridad y encubrimiento calificado por el hecho precedente, todo ello en concurso real; a Hugo Alejandro Prezzo, como partícipe primario de los ilícitos antes mencionados y a César Nicolás Ramírez, también como partícipe primario de los delitos referidos, excepto el de encubrimiento agravado por la gravedad del hecho precedente".

No se pudo establecer que alguno de los disparos que efectuó Capellani fuera el que mató a Joaquín. Para la Justicia, quien lo hizo, está prófugo. Y se trata de Mariano González, uno de los barras de Alem e hijo de Carlos González, el presidente del club. El otro hijo, Ariel González, hermano del prófugo y también ex funcionario municipal de General Rodríguez, fue beneficiado por el mismo juez hace un mes, en un fallo tan sorpresivo como polémico.

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