Seguridad 14 AGO 2025

Cayó un piloto acusado de ayudar a intentar escapar a un capo narco desde Ezeiza hasta Gral Rodríguez

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Se trata de Daniel Guategui, de 71 años, quien estaba en la mira de la Justicia por haber cumplido un rol esencial en el intento de fuga de Esteban Lindor Alvarado, un capo narco de Rosario y enemigo de la banda Los Monos. En marzo de 2023, la Policía Federal frustró su plan, que incluía un traslado hasta nuestro distrito, donde lo esperarían sus secuaces

La Gendarmería Nacional ha logrado un importante avance en el resonante caso del fallido intento de fuga en helicóptero del peligroso capo narco Esteban Lindor Alvarado. Después de años prófugo, fue detenido Daniel Guategui, un experimentado piloto de 71 años, acusado de ser una pieza clave en la logística de este cinematográfico plan. Su captura cierra otro capítulo de una trama que mezcla narcotráfico, aviación clandestina y un frustrado escape que buscó burlar los muros de una de las prisiones más seguras del país.

Guategui fue arrestado a mediados de julio, posiblemente en una zona del Litoral argentino, cerca de pistas clandestinas que conocía a la perfección. Llevaba siete años siendo buscado: dos en Argentina y cinco en Paraguay. Su nombre estaba “marcado” desde 2018, cuando la Secretaría Nacional Antidrogas de Paraguay lo vinculó a un operativo en el que se incautaron seis avionetas y 448 kilos de cocaína. Durante su tiempo como prófugo, el piloto utilizaba identidades falsas y evitaba la exposición pública, moviéndose entre ambos países. 

Aunque Guategui no pilotaría el helicóptero en la fuga (esa tarea estaba a cargo de otro hombre apodado “Lobo”), su participación fue fundamental en la logística del plan. Según la investigación de los fiscales Cecilia Incardona y Diego Iglesias, Guategui fue el encargado de contactar a Andrés Donnet, un piloto fumigador y amigo suyo en Gualeguaychú, para alquilar un hangar cerca de la ruta 136. En este hangar, se guardó el helicóptero Robinson 44 que sería utilizado en el escape, al cual se le modificó el ploteo y se le colocó otra matrícula para despistar a las autoridades. 

El audaz plan y su conexión con General Rodríguez

El plan de escape de Esteban Lindor Alvarado, uno de los jefes narco más temidos del país y condenado a prisión perpetua en 2020 por delitos como el crimen del prestamista Lucio Maldonado, era digno de una película. Consistía en sacar a Alvarado de la cárcel de Ezeiza “por la puerta grande” y “colgado de un helicóptero”, en una maniobra que no debía durar más de 20 segundos.

Leé también: Quién es el peligroso narco que iba a fugarse en helicóptero de una cárcel y lo esperaban en General Rodríguez

El destino final del narco, una vez liberado, sería un campo en General Rodríguez, donde lo esperarían sus secuaces armados y con una flota de vehículos para ayudarlo a ocultarse. Alvarado, desde su celda, incluso miraba videos de YouTube y debatía con “Lobo” sobre los despegues y aterrizajes del helicóptero, llegando a contemplar la posibilidad de no descender y subirlo mediante una red atada a los patines de la aeronave. 

El 10 de marzo de 2023, el piloto “Lobo” partió desde Entre Ríos, pero el plan se desmoronó. En lugar de sobrevolar el penal de Ezeiza, el helicóptero aterrizó en un predio del Country Club Banco Provincia, en Moreno. Simultáneamente, las autoridades allanaron la celda de Alvarado, secuestraron el helicóptero y detuvieron a Andrés Donnet y a Gianluca Orpianesi en Entre Ríos. Se ha determinado que Alvarado habría financiado a “Lobo” con una suma de entre 70.000 y 120.000 dólares para el plan, incluyendo un curso de aviación, con un pago adicional de 100.000 dólares si el escape tenía éxito. 

Los delitos del capo narco que iban a traer en helicóptero hasta General Rodríguez

A Alvarado, uno de los ex miembros de su organización lo había calificado como "el asesino serial más grande de la Argentina". En su historial delictivo está registrado que en 2012 fue condenado a seis años de prisión por el robo de autos de alta gama, aunque continuó digitando las operaciones desde su celda. En 2017 obtuvo la libertad condicional.

En febrero de 2019, cuando tenía un pedido de captura, fue atrapado por la Policía en un camping de Córdoba por el asesinato del prestamista. Ese día había arrojado un teléfono Iphone 7 al agua, que fue recuperado y enviado a Estados Unidos para obtener de él evidencia sensible como audios donde impartía órdenes para llevar a cabo distintos delitos. 

Fuente: Infobae / Análisis